Harta de verlas allí, pensé en hacer mermelada, pero como tengo varios botes todavía sin utilizar, al final, pensé, las tendré que tirar. Pero con el ingenio agudizado por la maldita crisis que nos ocupa, y con una lámina de pasta brisa que tenía en el congelador hice esta rica tatín (tatén o tatán, según el nivel de francés que tengas).
Tenía 5 nectarinas grandes, una lámina de pasta brisa, un molde de corona metálico y una tarde de las que a pesar del calor, harías cualquier cosa por no pensar, incluso encender el horno.
Pues encendí el horno y lo puse a 200º, con un par, a precalentar...
Partí las nectarinas en dos, les quité el hueso, las pelé y las puse en una sartén amplia, con una cucharada de azúcar por nectarina y medio vasito de agua. Las dejé a fuego lento que se pusieran blanditas y se caramelizaran.
Las puse en el molde con la parte curva hacia abajo, les tiré el caramelo sobrante de la sartén y las cubrí con la lámina de pasta brisa, doblando hacia dentro la pasta sobrante, que no era mucha, y lo dejé hornear unos 15 minutos.
Todavía caliente, para que el caramelo no se pusiera duro, la pasé a la bandeja de los gatitos, tan mona...
Estaba muy rica... la serví con una bolita de helado de chocolate...
bona bonissimaaaa!! jo tinc ganes de fer-la amb pressec ! a veure si m'animo ja! petons
ResponderEliminarQué rica que te ha quedado esta tatín! A ver si me animo yo a hacer una!
ResponderEliminarSaludos!
Luis (asicocinamosencasa.blogspot.com)